Famoso por crear y darle vida a la criatura ‘Alien’ en la película de 1979 de Ridley Scott, H. R. Giger es un artista y escultor reconocido por su estilo, muy personal, que combina sensualidad, fetichismo y seducción subliminal, el cual se define hoy en día como biomecánico.
La obra de Giger ha tenido un impacto significativo en el mundo del arte y la cultura. Su estilo inconfundible y provocador ha sido fuente de inspiración para numerosos artistas y ha dejado una huella indeleble en el cine, la música, los videojuegos y la moda.
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Su inspiración venía casi siempre de sus tragedias, entre ellas, la que lo marcó fue la de su primera novia, Li Tobler, quien se suicidó en 1975 a los 27 años. Ese trágico hecho hizo que cambiara muchos rasgos en su manera de pensar y pintar sus cuadros, ya de por sí extraños, pasando de ser terroríficos hasta rozar con lo demencial y lo satánico.
Como dato curioso, el nombre de su exnovia da vida y título a una de sus obras más famosas; la de Li II. En él se puede ver el rostro de su novia mezclado con muchos elementos que dan la apariencia de uno de sus primeros modelos biomecánicos.
Con todo esto, Giger empezó a crear su propio camino y tras pasar por el cine estuvo involucrado en los videojuegos, contribuyendo directamente con dos: Dark Seed y Dark Seed 2. Por lo que, especialmente, el equipo de Nintendo se ha inspirado en su arte para crear asombrosas sagas.
Por ejemplo, allá por 1986 se presentaba el increíble Metroid para NES, este era el inicio de una de las sagas de acción y aventuras más reconocidas en la que es inevitable encontrar similitudes entre el videojuego y la película ‘Alien’, desde la protagonista femenina, los nombres, las bestias, hasta las estatuas claramente sacadas de la exploración de la visión del artista.
Entre los más recientes está ‘Scorn’ un juego de terror en primera persona del desarrollador serbio Ebb Software, que pone los pelos de punta con esa bizarra mezcla de biomecánica, símbolos sexuales y truculencia.
Giger tuvo una estrecha relación con el mundo de la música, principalmente con el rock y el metal, pues muchas bandas y artistas acudieron a su talento para darle vida por medio de su arte a sus producciones, plasmando en las portadas de sus discos el peculiar arte del suizo.
Trabajó con Korn, Danzig, Dead Kennedys, Celtic Frost, Carcass, Magma, Deborah Harry y Emerson Lake and Palmer, entre otros. Además, diseñó guitarras y bajos para Ibanez, en las cuales se puede apreciar su estilo de horror cyber-espacial.
Su influencia también se puede ver reflejada en el trabajo de reconocidos tatuadores como Paul Booth, Víctor Portugal, Paco Dietz, Yomico Moreno, Jack Ribeiro o Robert Hernández.
H.R. Giger falleció en 2014, pero su legado sigue vivo influyendo en artistas contemporáneos de diversas disciplinas. Su visión única del erotismo ha desafiado los límites de lo convencionalmente aceptado como «sexy» o «erótico» y a su vez, su representación del cuerpo humano y su fusión con elementos mecánicos han explorado los rincones más oscuros de la psique humana.