Créditos: Twitter @CamaraColombia

Congreso de la República sufrió daños por temblor: sin lesionados porque “no había nadie»

Como consecuencia del fuerte movimiento telúrico que se sintió en Bogotá, las instalaciones del Congreso sufrieron varios daños materiales.

Indira Córdoba

Sobre el mediodía de este 17 de agosto, los habitantes de Bogotá vivieron momentos de pánico al sentir un fuerte temblor que, según reportó el Servicio Geológico Colombiano, fue de magnitud 6.1 con epicentro en el municipio El Calvario, Meta. Tras el movimiento telúrico se presentó una réplica de magnitud 5.6 que aumentó el temor en los ciudadanos.

Ante el temblor, los habitantes de la capital tuvieron que evacuar de sus hogares y lugares de trabajo para salvaguardarse ante cualquier catástrofe. Por fortuna, hasta el momento no se reportan mayores afectaciones, salvo algunos daños materiales en algunas construcciones y edificaciones.

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Entre las estructuras afectadas por los fuertes temblores que se sintieron en toda la capital colombiana, estuvo el Congreso de la República, en donde se reportaron daños materiales tras el primer temblor.

Temblor causó daños en el Congreso de la República

Según reportaron en redes sociales, el Salón Elíptico del Congreso de la República sufrió varios daños materiales por el fuerte movimiento telúrico de este jueves. En las fotos se logra ver cómo varios pedazos del techo cayeron sobre los puestos en donde se suelen sentar los congresistas.

En las imágenes también se logra ver los enormes escombros que terminaron sobre las sillas y las mesas de los congresistas, quienes, por fortuna no se encontraban en el lugar. Incluso, tras la emergencia, en la cuenta de Twitter de la Cámara de Representantes confirmaron que se canceló la plenaria que estaba dispuesta para las 2pm de este 17 de agosto.

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En medio del sentimiento de pánico que invadió a los bogotanos, hubo quienes bajaron los ánimos poniéndole una pisca de humor al hecho y comentaron la publicación de los daños que sufrió el Congreso de la República con un poco de sarcasmo haciendo referencia a que los congresistas casi nunca suelen estar en su lugar de trabajo.

“Menos mal no trabajan nunca”; “No hubo lesionados porque no había nadie”; “Como no van a sesión, la naturaleza no puede hacer su trabajo”; “La fortuna de que nunca haya nadie trabajando en ese lugar”, fueron algunos de los comentarios.

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