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En 1987 Freddie Mercury fue diagnosticado con SIDA, y el mismo año daría su última entrevista en la que nadie siquiera imaginaba la enfermedad a la que se enfrentaba en cantante.
El último en entrevistarlo fue Rudi Dolezal, un cineasta austriaco quien estaba encargado del documental del artista ‘Mercury Lover of Life, Singer of Songs’. Durante este diálogo el líder de la prestigiosa banda de Queen contó lo emocionado que se sentía en asumir el reto de impulsar su carrera en solitario y lo mucho que significaba poder trabajar en un proyecto de ópera con la leyenda Montserrat Caballé.
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Mercury quien se mostraba más apago de lo normal no despertó ninguna sospecha sobre la enfermedad que lo azotaba en ese momento. Durante la entrevista, el cantante se fuma un cigarrillo, mientras le responde a Dolezal sobre a lo que ha estado dedicado en los recientes días.
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«Estas dos últimas semanas he estado trabajando con una mujer increíble, una gran estrella de la ópera, se llama Montserrat Caballé, es de Barcelona”, mencionó el cantante. «Me llamó hace unas semanas y me dijo que le gustaría cantar conmigo. Así que, por supuesto, me caí de bruces al suelo y pensé: ‘Dios mío’. Pero me encanta desde hace años».
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Cabe mencionar que Mercury y Caballé harían dúo para cantar el sencillo de titulado ‘Barcelona’ el cual sería el himno de la apertura de los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona respectivamente. Sin embargo, debido a la muerte de Freddie en 1991, el tema no pudo ser interpretado en directo.
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No obstante en 1988 se cantó para darle la bienvenida a la bandera olímpica, en la cual la Mercury participaría convirtiéndose en la última actuación en del célebre vocalista de Queen.
