En los 90s, la vida de Slash estaba mediada por las drogas y los excesos, según ha contado el mismo guitarrista, consumía cocaína, heroína y alcohol. Este episodio habría sucedido en 1992, cuando el hombre estaba en su habitación de hotel, en una de las giras que tuvo con la banda.
Según se ha contado, a Marr Sorum, quien en ese momento era baterista de la banda, lo llamó un trabajador del hotel y le dijo que Slash estaba muerto. Algunas fuentes aseguran que el corazón del artista habría dejado de latir.
Por fortuna, el baterista llegó rápido al lugar y habría hecho una maniobra de reanimación que funcionó y Slash volvió a respirar.
“Soy realmente afortunado de haber logrado pasar por todo eso y salir por el otro extremo y tener mi pasión por la música intacta y estar físicamente bien. Me considero muy afortunado, porque debería haber sido al revés”, dijo en aquel entonces.
Describió el momento en que los paramédicos lograron revivirlo, como una “sensación inconfundible”.
Así que, hasta ese momento, recuerdo haber perdido el conocimiento y recuerdo… hay una cosa que sucede cuando los paramédicos te despiertan de una muerte como esa donde es sólo, como, este enorme choque de energía y luces, voces y pandemonio, y es una sensación inconfundible. Lo he sentido unas cuantas veces, y lo recuerdo”, comentó.
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