El caso ocurrió en Indonesia y se dio a conocer a través de la revista médica Science Direct y reportado en el área Radiology Case Reports, cuando un hombre de 34 años se acercó de urgencia al hospital ya que no podía orinar y tenía un dolor insoportable en sus genitales.
Sin dar detalles, el hombre fue remitido a rayos x para ver cuál podría ser la causa de su dolor, momento en el que los especialistas se llevaron gran sorpresa. En los exámenes pudieron notar que el individuo tenía incrustado un cable de auriculares en la uretra, suceso que ocurrió mientras se masturbaba.
Los doctores que intervinieron tuvieron que realizar la extracción del objeto con unas pinzas de agarre y mencionaron que por suerte el cable no había llegado a la pared de la vejiga.
Este comportamiento fue diagnosticado como «poliembolocoilamanía” por un equipo psiquiátrico, el cual consiste en insertar cuerpos extraños en orificios como el recto y la vagina.
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