Por ejemplo, el partido Inglaterra contra Irán tuvo un tiempo añadido de 14 minutos. Este ‘tiempo extra’ hace parte de la preocupación de la Comisión de Árbitro de la FIFA de un aumento del tiempo efectivo de juego.
Una medida que contempla el tiempo que tardan los futbolistas en salir de la cancha de juego cuando entran los suplentes, así como una forma de “aligerar las paradas”.
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Pierluigi Collina, presidente de la Comisión de Árbitros de la FIFA explicó que esta estrategia permite mayor meticulosidad en los encuentros.
“Lo que queremos hacer es calcular con precisión el tiempo agregado al final de cada mitad. Puede ser el cuarto árbitro en hacerlo, tuvimos éxito en Rusia y esperamos lo mismo en Qatar. No estoy hablando de la intervención del VAR, esto es algo diferente y calculado por el Árbitro Asistente de Video de una manera muy precisa”, explicó Collina a ESPN.
De esta manera, es el cuarto árbitro el que determina el tiempo añadido en los encuentros. Asimismo, contempló los tiempos de celebraciones entre goles que suele oscilar entre minuto y minuto y medio, que suele descontarse del tiempo efectivo del juego.
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Por ello, el partido Inglaterra contra Irán ha sido el partido más largo del Mundial hasta el momento, con ocho goles anotados. Si se tiene en cuenta la compensación de estos minutos, además del tiempo que tardó en ser atendido el portero Alireza Beiranvard, se obtiene el tiempo extra.
Esta medida de la FIFA busca ser más estricta en materia de tiempos y jugadas dudosas. Sin embargo, puede confundir a los aficionados ya que el cronómetro se detiene en el minuto 90.
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