Hoy en Radioacktiva
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Este lunes se reportó una caída masiva de WhatsApp, Instagram y Facebook, tres redes sociales de gran importancia para los usuarios que comparten sus contenidos, trabajan y se entretienen a través de las mismas.
Si bien después de la información que se conoció a través de redes sociales alternas, como Twitter y YouTube, donde se conoció sobre el desplome, en un principio solemos tomar ciertas actitudes en las que culpamos al servicio móvil y no a la compañía de Mark Zuckerberg.
Por esta razón, gracias a los comentarios y los memes que se conocen en Twitter, red social que sirve de refugio cuando se presenta una caída global, los usuarios reportan las acciones que emplean una vez comienzan a evidenciar el desplome de redes sociales como WhatsApp, Instagram y Facebook, aunque esta vez fueron las tres en conjunto.
Apagar el módem
Esta es una de las primeras acciones que se suele tomar después de ver cómo las redes sociales comienzan a presentar fallas.
Comunicarse con el operador
Muchos optan por llamar a sus operadores de servicio móvil u hogar para pedir una explicación del POR QUÉ no hay cobertura en las redes sociales.
Reiniciar el celular
Este es uno de los primeros consejos de los que nos acordamos cuando las redes sociales comienzan a fallar, ya que alguien, por alguna razón, algún día aseguró que es la alternativa más eficaz para que «regrese el servicio».
Bajar los tacos
Bueno, la desesperación muchas veces no conoce los límites. Ahora bien, cuando en casa se cuentan con electrodomésticos que tiene acceso a internet, como un smart tv, quizá alguien quera comprobar que es un fallo general de la red en toda la casa y no solo en redes sociales.
Entrar a Twitter
Esta se ha convertido en una costumbre bastante eficiente cuando se presentan fallos en WhatsApp, Facebook o Instagram, ya que es una red social externa a la casa matriz de Zuckerberg, así que vamos a encontrar información detallada de lo sucedido.
Enviar mensajes a amigos de manera desesperada
Es mejor comprobar el fallo en por mano propia, así que una de las costumbres es mandar mensaje tras mensaje a ver si llegan a su destinatario.
