La mujer se encontraba en el sitio cuando Bryon Stemen, el atacante, se acercó y chocó contra ella. Katie sintió un fuerte dolor en su glúteo y se fue a su casa, allí descubrió que tenía una herida e inmediatamente llamó a las autoridades.
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Los hechos sucedieron en Churchton, Maryland, Estados Unidos, en febrero del 2020. La policía revisó las cámaras de seguridad que captaron el momento del ataque.
El sujeto fue capturado y al revisar su vehículo encontraron más jeringas con su semen, lo que apunta a que no era la primera vez que realizaba esto. Byron fue condenado a diez años de prisión.
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