Al parecer, la pareja decidió comprar un test de compatibilidad genética para entretenerse. No obstante, cuando llegaron los resultados, se llevaron tremenda sorpresa, ya que descubrieron que su hijo de 12 años no es de Vanner.
“Cuando miré esa página y vi que Donna aparecía como la madre y yo como un padre desconocido, pensé: ¿qué querían decir con padre desconocido? Si yo soy su padre”, expresó el hombre al medio mencionado anteriormente.
Debido al escándalo de la anécdota, la clínica se manifestó al respecto y reveló que durante el proceso de los Johnson confundieron el óvulo de Donna y lo fertilizaron por error con el esperma de alguien más. Por tal motivo, Vanner decidió contactar al padre biológico de su hijo para entablar una demanda contra el centro de salud donde realizaron el procedimiento.
“Yo entiendo que existe esa posibilidad, pero es muy remota. Hemos tenido que superar muchas emociones. Primero, la de separar de este tema el amor que tenemos por nuestro hijo, que no ha cambiado, y a la vez seguir lidiando con el problema”, puntualizó Donna, quien afirmó que ambos siguen amando al pequeño como si fuera de Vanner.
MÁS SOBRE: