La influencer estuvo de visita con tres de sus amigos en dicho parque, donde una enorme cascada llamó su atención y decidió tomarse una foto muy cerca de la orilla. Una vez allí, habría perdido el equilibrio y resultó cayendo desde una altura de cinco metros, según informaron algunos medios locales.
Pese a que los amigos de la mujer se comunicaron con emergencias y rápidamente llegaron al sitio, lastimosamente ya no había nada que hacer para salvar su vida y murió al llegar al hospital.
“La vida debería ser divertida, no tonta”, destacó Cheung en su perfil de Instagram, donde solía publicar un poco de las actividades de senderismo, kayak, surf y otras un poco más extremas que le gustaba realizar.
Este es solo uno de los cientos de casos de personas que mueren por intentar fotografiarse en lugares arriesgados. De acuerdo a El Tiempo, de 2011 a 2017 fallecieron 259 tomándose una foto en diversos sitios del mundo.
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