Los conciertos están de vuelta y con ellos una serie de requisitos para seguir cuidándonos, ya que el virus no se ha ido. Entre ellos está Foo Fighters, quienes pedirán a sus fanáticos tener prueba negativa o vacuna contra la COVID-19.
Según medios, Ticketmaster, proveedor de las boletas, exigirá estas pruebas al momento de ingresar a los shows.
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La banda liderada por Dave Grohl regresó a los espectáculos con público en el Madison Square Garden, agotando todas las entradas. A finales de julio se presentaron en Lollapalooza y en el 2022 estarán en el festival Boston Calling.
Las exigencias realizadas por la banda han recibido críticas, pero por parte de los «anti-vacunas». Estos dicen sentirse discriminados, incluso se han enfrentado en los diferentes conciertos que han tenido.