El roquero ha compartido una foto de su mujer Brittany en bikini que ha dado pie a un encendido debate entre quienes dan por buena su palabra de que es real y quienes intuyen retoques estéticos.
Sin pretenderlo, el roquero Tommy Lee ha dado pie a un encendido debate en su cuenta de Instagram centrado en los atributos de su esposa Brittany Furlan que algunos de sus seguidores no terminan de creer que sean fruto de una buena genética o, en todo caso, de su duro trabajo en el gimnasio.
Todo comenzó cuando el líder de Mötley Crüe compartió en su perfil una imagen en la que su pareja aparece ataviada con un diminuto bikini de color morado durante unas vacaciones en México: «Me va a matar por publicar algo así, pero mirad este cuerpo de infarto cien por cien real», escribió el batería junto a la instantánea.
Lo que debería haber quedado en un mero gesto romántico ha acabado por colocar a Tommy en la incómoda posición de verse obligado a desmentir los supuestos pasos por quirófano de Brittany que algunos han querido adivinar, por ejemplo, en su generoso escote.
«No, es todo real», ha respondido él a uno de los mensajes que afirmaban que Brittany se había puesto implantes en los pechos.
Por suerte, todas esas dudas sobre su impresionante figura no parece haber afectado lo más mínimo a la protagonista de toda esta historia, ya que lo único que le molesta de la publicación de su marido es el gesto poco favorecedor en que la habría sorprendido: «Dios mío, mira qué cara tengo», ha comentado ella.
Aquí la foto:
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She gonna kill me for posting this but look at this 100% natural body ?