Con la denominación provisional de ‘Proyecto Scarlett’, la nueva máquina tendrá un procesador cuatro veces más potente que el de la actual Xbox One X, será compatible con la máxima resolución de imagen, la de 8K, y además generará imágenes a una velocidad máxima de 120 fotogramas por segundo.
«Solo puedo decir que no tenemos intención alguna de que Scarlett vaya a ser nuestra última consola», ha asegurado tajante en una entrevista al portal de noticias Giant Bomb.