La red social Facebook ha vuelto a salir a la palestra para entonar el ‘mea culpa’ y asumir responsabilidades por un nuevo error que habría comprometido temporalmente la seguridad y la privacidad de la que deberían gozar sus cuentas, especialmente dado el carácter íntimo y personal de las imágenes y contenidos que administra la plataforma.
De forma más concreta, la firma liderada por Mark Zuckerberg ha tenido que emitir un comunicado para informar de los más de 600 millones de contraseñas que fueron erróneamente registradas sin encriptación de por medio y, por tanto, visibles y accesibles para todos aquellos que estuvieran dispuestos a sacarles el máximo partido.
«La incidencia llamó nuestra atención en cuestión de segundos porque nuestros mecanismos de autentificación están expresamente diseñados para que las contraseñas no se puedan leer a simple vista. Ya hemos solucionado la incidencia y, a modo de precaución, hemos notificado a todos aquellos cuyas contraseñas fueron erróneamente registradas de esa forma», ha asegurado Facebook.