El músico británico Ozzy Osbourne donó hace 9 años su sangre para que se realizara un análisis a sus genes y así poder explicar la razón del porqué sigue vivo a pesar del abuso de diversas sustancias.
El mismo músico sintió la curiosidad de saber la razón del porque sigue en este mundo:
«Dadas las piscinas de alcohol que he consumido a lo largo de los años, sin mencionar toda la cocaína, la morfina, las pastillas para dormir, el jarabe para la tos, el LSD, el Rohipnol… Lo que sea, realmente no hay ninguna razón médica plausible por la que aún debería estar vivo”.
En la investigación, la cual fue realizada por Knome Inc., se descubrió una mutación nunca antes vista que puede explicar la capacidad del rockero para consumir grandes cantidades de alcohol y diversas variaciones genéticas que logran predisponerlo a las dependencias de drogas.
El investigador genético Bill Sullivan afirmó que «Ozzy es de hecho un mutante genético», así lo informó el New York Post.