Aunque solo leyendo el titular parece puro capítulo de novela mexicana, pues en realidad esta triste historia sucedió en Sudáfrica, donde al novio le llegó su amante vestida de blanco simulando ser la novia de la boda a la iglesia.
La mujer entró como si nada y cuando se quitó el velo los asistentes pensaron que se trataba de una broma, pero al escuchar los insultos y los reclamos se dieron cuenta que era la amante que había llegado hasta el altar para felicitarlo por su decisión.
Pese a que varias personas trataron de sacarla de la iglesia, la mujer no dejaba de ofender al novio mientras la novia oficial miraba atónita el regalito de bodas que le había llegado. Aunque se desconoce el desenlace de la historia (si la amante ganó el ramo) el video la da la vuelta entera a todo internet.