El gigante actual del streaming descubrirá a lo largo de los próximos meses cómo le afecta la aparición en escena de otras plataformas como Disney+ y AppleTV+, pero por el momento a la compañía no parece preocuparle demasiado esa competencia directa.
En vista de que Hulu, por ejemplo, no afectó a su crecimiento (en los últimos seis años Netflix ha seguido ganando suscriptores de manera constante en Estados Unidos y Canadá), no ve por qué debería de preocuparse. En su opinión, el lanzamiento de esos nuevos servicios solo acelerará el cambio en los patrones de consumo de televisión, facilitando la transición del modelo tradicional de visionado al online por demanda.