El operativo se realizó después de que el granjero escoces Bruce Grubb llamó a la policía desesperado durante la noche para advertir que cerca de su hogar estaba merodeando un felino que podría atacar a los animales y las personas que viven en el lugar.
Después de terminada la extraña situación, la Policía de Aberdeenshire decidió explicar el hecho en las redes sociales y reafirmarle a la comunidad que su objetivo final es proteger al público y mantener a sus policías seguros ante situaciones inciertas, hasta que se sepa con exactitud lo que está pasando, pues cada opción tiene que ser considerada.