Paul Flart, quien fue guardia de seguridad de un hospital en Florida, EE. UU, grabó durante seis meses y publicó en su cuenta de Instagram, videos en donde se escuchaban los sonidos que hacía cuando se tiraba pedos, algo que le costó su puesto, pues na sus jefes no les gustó lo que realizaba.
El hombre, quien realizó una cuenta exclusivamente para mostrar los videos de sus pedos la cual cuenta con 20.000 seguidores, explicó cómo surgió la idea de grabar los sonidos que causan asco y repulsión a unos y a otros les saca una carcajada:
“El lobby (del hospital) tiene muy buena acústica y, como es natural, todos nos tiramos gases. Un día me tire uno como chévere y con muy buen sonido, así que la próxima vez que sucedió decidí grabarlo y enviarlo a mi grupo de chat”.
Cuando el hombre fue despedido del hospital, realizó un video en el que dijo:
“Será seguir tirándome pedos por toda Florida”