Tal y como lo afirmó el mismo actor, quien hoy tiene 28 años, admitiendo que esto ocurrió cuando él tenía entre los 11 y 12 años, añadiendo que lo pudo superar después de los 13 o 14 años. Años donde se sentía muy incómodo por la situación, pero al fin y al cabo quedó como una anécdota de preadolescentes.
Entre otros detalles que contó el actor, fue que en esos sets de grabación de la exitosa saga de Harry Potter, se vivía como si se estuviesen en una secundaria y no en una película, para lo cual todos llegaron a sentir las “hormonas alborotadas” y en cualquier momento se pudieron enamorar al menos en una ocasión.