Supuestamente, cuando las niñas entraron en trance empezaron a balbucear, hacían sonidos de animales y esto provocó que todo el mundo relacionara el hecho con un momento paranormal.
Según contó la madre de las chicas, ellas recibieron una cadena de mensajes en su WhatsApp que contenía una imagen satánica y esto fue lo que provocó su extraña reacción. Médicamente el diagnostico fue: un ataque de histeria.