La peleadora Hannah Kampf se enfrentaba al primer asalto contra Asha Roka, y rápidamente terminó a merced de su rival al recibir una gillotina. Asha aplicó la llave con tanta fuerza que hizo que Hannah perdiera el conocimiento.
Esta situación normalmente lleva a que el árbitro intervenga, sin embargo este no fue el caso. Al ver que nadie hacia nada por detener la situación, el entrenador de Hannah decidió tirar la toalla y detener la pelea para salvar a su deportista de una muerte por asfixia.