Lo que hizo este héroe geek un tanto loco, fue meter un Xbox One S y un PlayStation 4 Slim en una sola carcaza, haciendo que ambas consolas compartan un solo puerto HDMI y una fuente de poder.
Aún así, la idea de tener solo una consola sería magnífica, ya que de esa manera todos podríamos jugar lo mismo. Lo único que falta es que Sony y Nintendo se apiaden de los amantes de esta creación y vendan sus juegos para ser jugados en un PC.
Aunque no nos mintamos, de aquí a que eso pase, terminaremos así:
Al parecer el inventor de esta fusión acepta pedidos. Sin embargo, analizándolo bien, no creemos que salga más barato que comprar ambos sistemas por separado.