Realizando una acrobática escena en Londres, el actor saltó de una azotea pero un error de cálculo en su movimiento le ocasionó un impactante golpe, ya que Tom no pudo ocultar el dolor.
En las imágenes se pude ver como el actor de 55 años, quien estaba asegurado con un arnés, solo pudo sujetarse del borde de la fachada del edificio, trepó hasta el techo de la construcción y logró reponerse del fallido salto.
El equipo técnico dejó todo a un lado para socorrer al actor que con dificultad logró ponerse de pie, y aunque The Hollywood Reporter trató de ponerse en contacto con el representante de Tom y con Paramount Pictures, productora de la película, aún no se tiene ninguna respuesta sobre la salud del actor.