Craig McClellan, el abogado de la familia Walker revelo en dicho programa que el actor no murió instantáneamente con el choque automovilístico, sino calcinado.
E noviembre del 2013 la noticia de la muerte de Paul sacudió el mundo del cine, ya que el actor venía de un evento de caridad como copiloto de su Porsche, y aunque él como su amigo Roger Rodas, quien conducía el carro, no se encontraban bajo los efectos del alcohol, iban a una velocidad que superaba los 140 kilómetros por hora.
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