Todo parecía estar fríamente calculado, pero un ‘pequeño’ error cambió el resultado. Lo que ocurrió fue que en lugar de suministrarles 0.3 gramos de cafeína, los jóvenes recibieron más de 30 gramos cada uno, es decir, lo que equivale a tomarse 300 tazas de café.
Luego del asunto, Rosseto estuvo internado en hospital por seis días y perdió 12 kilos, además de sufrir pérdida de la memoria a corto plazo. Por su parte, Parkin estuvo internado dos días y perdió 10 kilos.
A la universidad le impusieron una multa de 400 mil libras por la ‘embarradita’.