Así fue como los jugadores se dividieron y cada equipo estaba conformado por cuatro jugadores: uno de ellos tenía a Timothy Fosu-Mensah, David de Gea, Paul Pogba y Ashley Young; mientras que en el otro terreno estaban Wayne Rooney, Anthony Martial, Daley Blind y Jesse Lingard.
Al principio el partido estaba bastante cerrado, pero el mismo Pogba se encargó de abrir el marcador con un remate de larga distancia. El empate lo tuvo Rooney pero lo desperdició, lo que hizo que el partido finalizara 1-0.