Después de casi cinco meses de la inesperada muerte del vocalista de Linkin Park, quien se quitó la vida el 20 de julio del 2017, se conocieron nuevos detalles de su autopsia.
Según la información de TMZ, el portal accedió al documento médico que detalló la autopsia de Chester, el nuevo reporte descarta algunos datos que se había conocido al principio.
Los profesionales que revisaron el cuerpo, afirmaron que el cadáver de Bennington tenía algo de alcohol en su sistema en el preciso momento que decidió quitarse la vida, aunque no en cantidades considerables. Pese a que los primeros informes aseguraban haber encontrado rastros de MDMA (éxtasis), pues otro informe detalló que no había presencia alguna en su cuerpo.
Por otra parte, en la autopsia identificaron Zolpidem, un hipnótico que Chester combinó con cerveza.
Finalmente el informe concluyó con una razón: Chester no estaba bajo los efectos de las drogas cuando tomó la decisión de acabar con su vida.