Samuel Jankowsky se montó al avión que se suponía lo llevaría al Reino Unido. Se sintió algo raro porque el avión era particularmente grande para un vuelo tan corto. Sin embargo, se sentó y se quedó dormido. Hasta ahí, todo bien.
Cuando se despertó, estaba llegando a Las Vegas. Claramente la policía se alarmó y como el mismo Samuel afirma, lo trataron «como un criminal común, incluso me encerraron en una pequeña celda y me registraron completamente».
Todo se solucionó y a los dos días se reunió con su esposa que estaba embarazada. Al contarle lo que había pasado, «se partió de risa durante 10 minutos seguidos», afirmó.
Conozcan a Samuel:
[ttt_fotogaleria]