Sin embargo, la ciencia afirmó que es importante ponerle agua a esta bebida alcohólica como complemento. Así que mientras leen esta nota, cojan un vaso, sírvase un trago de whisky y empiece a experimentar.
Resulta que la Universidad Linnaeus de Kalmar, en Suecia, afirmó que es muy bueno agregar unas gotas de agua a su trago.
¿Pero por qué? Resulta que las moléculas del agua, en especial una llamada ‘guaiacol’, tiene una interacción con el sabor y además logran despertar nuevos aromas.
Hay dos ‘clases’ de whisky, por decirlo así. Unos que sí pueden combinarse con agua, es decir aquellos que tienen un componente hidrófilo y los que tienen un componente hidrófobo, y por ende rechaza esta adición de agua.
“Como la bebida es consumida primero en la interfase líquido/aire, nuestros resultados aclaran por qué agregar agua puede reforzar su gusto, dijeron los bioquímicos Bjorn Karlsson y Ran Friedman en su investigación. Comprender lo que ocurre a nivel molecular puede llevar a optimizar el gusto de esas bebidas”