Desde el principio Santa Fe quiso imponer condiciones y lo logró. En apenas 10 minutos de partido, Jonathan Gómez levantó un tiro de esquina perfecto y puso el balón a la cabeza de Urrego, quien de cabeza convirtió y levantó al Campín en un solo rugido. ¡Qué golazo!
Pero el León se durmió y, tras el gol, regaló la pelota al visitante. Tolima recuperó su fútbol de toque y salida por las bandas y empezó a complicar la vida de Santa Fe. El conjunto cardenal no lograba conectar tres pases seguidos y, de no ser por Castellanos, quien atajó de todo, la historia habría podido ser otra.
*Imágenes @ElRockAndGol – WIN Sports
Pocos apostaron por Santa Fe y se desahogaron en críticas contra el presidente; otros prefirieron no apostar por el fútbol del León y lo dieron por muerto. Ahí está. El primer campeón de Colombia vuelve para levantarse en lo más alto. Santa Fe consiguió una estrella que parecía -para muchos- estar pintada de cualquier color, menos rojo. La historia se escribe con goles; Santa Fe es el campeón del 2016-2. ¡Ruge, LEÓN!