La salida de cuatro de sus integrantes pone en riesgo a la banda
Desde el 19 de febrero del año 1980 la banda no se enfrentaba a una crisis más amenazante, y es que precisamente en dicho año falleció el cantante Bon Scott debido a una intoxicación etílica.
Las malas noticias llegaron en abril del 2014, cuando Brian Johnson anunció su retiro indefinido de la banda por recomendaciones médicas. En el mismo mes AC/DC confirmó que Malcolm Young, de 63 años, abandonaba la banda por un diagnóstico médico que aseguraba una demencia progresiva.
Otro duro golpe para la banda australiana llegó el día que se alejó Phil Rudd a causa de sus problemas con la ley, ya que en el 2015 la policía de Nueva Zelanda descubrió varias irregularidades sobre la renovación de la licencia de Rudd que lo certifica como piloto de helicóptero. Aparte de esto las autoridades hallaron restos de estupefacientes en el organismo del baterista; y para completar con la mala racha, lo señalaron de haber contratado un sicario para asesinar a dos personas. Sin contar que también recibió una demanda por posesión de drogas y prostitución en su residencia.
El bajista Cliff Williams prendió las alarmas con una posible desarticulación de la banda el pasado 8 de julio, pero aseguró que permanecerá en AC/DC hasta culminar la gira de Rock or Bust. Aunque la lista de convocados para reemplazarlo es demasiado extensa.