El Embajador remontó el partido y terminó ganando 2-1 a Nacional en el encuentro de ida por los cuartos de final de la Liga Águila. Quiñones abrió el marcador para los visitantes, pero en el segundo tiempo Millonarios fue revolucionario: cambio de esquema y triunfo. Ayron del Valle puso el empate de cabeza y Macallister Silva sentenció con un remate fuera del área. ¡Grande, Millos!
Los azules salieron ansiosos, casi nerviosos. No sabían muy bien qué hacer con el balón y prefirieron apostar por los pelotazos sin destino. Nacional, en cambio, tuvo la calma suficiente para dominar el campo, tocar la pelota y generar opciones. En apenas 15 minutos el verde se puso arriba. Machado se durmió en la marca, habilitó a Quiñones y éste aprovechó para dejar a Vikonis en el camino y definir. El Campín nunca hizo silencio. Había que alentar hasta el final.
Bien lo dijo Cocca: «La charla en el entretiempo no fue nada agradable». Regaño para Millos y otra actitud en la segunda mitad. El Embajador recuperó el balón y arrinconó a Nacional que no pudo aguantar el asedio capitalino. En el minuto 68′, la combinación Maxi-Ayron volvió a ser determinante. Centro de Núñez y cabezazo del goleador del torneo. Empate para el local y estallido en Bogotá.
Pero faltaba más. Cocca revolucionó las cosas y mandó a Robayo a la cancha. Millos jugando con tres centrales se volvió más potente y la recompensa llegó en el 74′. Macallister ingresó para cambiarlo todo; le dio ritmo, control y tranquilidad al equipo. Además, se animó con un remate desde fuera del área que se coló tras un rebote y decretó el 2-1 definitivo.
Gran actuación de Millonarios que supo corregir sus errores defensivos y darle vuelta al partido. La cita es ahora en el Atanasio y allá se va a quedar el alma. ¡VAMOS CON TODO MILLOS!