El futbolista colombiano James Rodríguez está ante la encrucijada más difícil de su carrera: seguir en el Madrid o buscar triunfar en otro lugar.
El fichaje de James Rodríguez costó más de US$80 millones al Real Madrid y allí es donde está la clave del presente y futuro del jugador.
En el pasado quedó el revuelo que causó su llegada en julio de 2014 al estadio Santiago Bernabéu, abarrotado de aficionados colombianos y madridistas ilusionados por la presencia de quien había sido la Bota de Oro y gran estrella del mundial de Brasil .
También el impacto que tuvo en su primera temporada bajo las órdenes del italiano Carlo Ancelotti, con quien fue protagonista en el campo y terminó siendo elegido el mejor centrocampista de la Liga española.
Fue una época de ensueño para un jugador que había llegado a la cima del fútbol con sólo 23 años.
Pero desde entonces, la involución del futbolista colombiano en el Real Madrid está llegando a punto crítico, hasta el punto que se pone en duda su continuidad vestido de blanco.
La última imagen de James no fue la de un jugador contento celebrando el empate en el último minuto del Real Madrid en el Camp Nou.
En la foto del vestuario que compartió el equipo en su cuenta de Instagram aparecen casi todos los jugadores sonriendo, a excepción de Ronaldo –con una pose más acorde a la de un modelo que a la de un jugador– y James, quien sale en el fondo de la imagen con su pulgar levantado, pero con un rostro serio.
No obstante el valioso punto obtenido con 1-1 frente al Barcelona, James no salió de titular al terreno de juego pese a las ausencias por lesión del galés Gareth Bale y el alemán Toni Kroos y ni siquiera disputó un minuto.
Por delante de él aparecieron los nombres del español Lucas Álvarez, el croata Mateo Kovačić, el brasileño Casemiro, el joven español Marcos Asensio y el dominicano Mariano Díaz.
Mucho ha cambiado desde aquella primera temporada en la que James jugó como titular los 29 partidos que disputó en Liga (2.346 minutos, 13 goles y 13 asistencias) a los pírricos tres partidos en los que ha salido desde el inicio de los siete juegos que registra en la actual campaña (287 minutos, 1 gol y 3 asistencias).
Zidane ha reiterado en varias ocasiones que cuenta con el futbolista colombiano, «que es jugador importante como los demás «, que «quiero que esté con nosotros», «que va a jugar, espero que más«.
Pese a que los hechos contrastan con sus palabras, no se le puede achacar al entrenador francés que esté marginando a James del equipo titular por un simple capricho personal.
Desde la llegada de Zidane hace 11 meses el Madrid ganó la Liga de Campeones, se proclamó campeón de la Supercopa europea, está de líder destacado en la clasificación de la Liga y lleva 33 partidos invicto, a uno del récord histórico que estableció el Madrid del holandés Leo Beenhakker en la temporada 1988-1989.
Coincidencia o no, el Madrid ha conseguido un balance que no logró con el futbolista colombiano en el campo , más allá que sea injusto echarle la culpa exclusivamente a él.
Es más un asunto del sistema y de las prioridades de un equipo que posee en la delantera a figuras como Cristiano Ronaldo, Gareth Bale y Karim Benzema.
La famosa «BBC» obliga a James a retrasar su posición en el campo y a jugar en una zona en la que no puede exhibir el fútbol con el que llegó al Madrid, de mediapunta.
Kross y el croata Luka Modric son dos jugadores que Zidane –así como sucedió con Ancelotti y Rafa Benítez– considera indiscutibles, lo que deja a James peleando por el lugar más defensivo del centro del campo con Casemiro , posición en la que el brasileño cuenta con ventaja.
En situación parecida a la de James se encuentra Isco, aunque el español lleva más partidos jugados en la Liga, más del doble de titular y más del doble de minutos.
El futbolista colombiano ha asegurado que no tiene ningín problema con Zidane y que tiene una buena relación con su entrenador, pero a menos que cambie algo radicalmente en el Madrid -o en su forma de jugar- es difícil ver un final feliz a su paso por la capital española.
El mundo del fútbol está pendiente de la situación del capitán de la selección colombiana y de su falta de minutos en el campo.
El tabloide británico The Sun publicó esta semana una noticia con un supuesto interés de Manchester United de intercambiar a James por el francés Anthony Martial , un jugador de características más ofensivas y con más gol.
Otros medios hablaron de una oferta concreta de la directiva de Old Trafford por menos de US$50 millones, o del interés de otros clubes como Arsenal, Manchester City y Liverpool .
En Italia surgen los nombres de Juventus o Inter , mientras en Francia está el París Saint Germain como posible destino.
El próximo plazo de transferencias se abrirá en enero y hasta entonces es poco probable que surja alguna información oficial.
El problema es que cualquier traspaso o préstamo no depende del jugador, al que le quedan todavía tres años y medio de contrato .
Si bien el Madrid podría estar dispuesto a negociar una salida a la baja, en ningún caso va a regalar a un futbolista que costó más de US$80 millones y que representa un activo comercial de gran interés en el mercado latinoamericano.
En Colombia preocupa la situación por la que atraviesa James y desde hace un año han habido movilizaciones en los medios de comunicación y a través de las redes sociales en respaldo de su capitán.
No sería de extrañar que en el fondo de todo esté la necesidad de que James recupere su mejor nivel en los próximos meses para que pueda llegar en plenitud de forma a los cruciales partidos que se le avecinan a la selección colombiana en las eliminatorias sudamericanas en marzo contra Bolivia y Ecuador.
James podría ser una de las alternativas en el crucial encuentro de esta semana del Madrid contra el Borussia Dortmund en la Liga de Campeones, pero el objetivo que se tiene que plantear es el de volver a ser uno de los mejores jugadores del mundo.
Así tenga que sacrificar su sueño de triunfar vestido de blanco.
INFORMACIÓN BBC MUNDO