La emoción de marcar un gol en un partido de fútbol donde el estadio está a reventar seguramente debe ser una experiencia muy emocionante, pero también hay que tener en cuenta la frustración que se debe sentir cuando anotan el gol, lo celebran con la hinchada pero anulan la jugada.
Este fue el caso de Kerem Bulut, jugador del Melbourne City que tras una jugada bastante complicada, logró quedar con el balón en los pies y rematar para conseguir el gol, salió corriendo a celebrar eufóricamente con la hinchada, pero un minuto después se dio cuenta que el gol fue anulado:
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