Quién no recuerda a Bob Ross, una de las figuras de la televisión y del arte, y como era costumbre, nos enseñaba lo “fácil” que era pintar, o él lo hacía ver así.
Bob era conocido por sus obras de arte y por supuesto por su afro, el mismo que lo hacía único e inconfundible como su programa ‘El Placer de Pintar’.
Sin embargo, parece que por muchos años Bob nos engañó respecto a su afro, pues ahora se conoció que ese no era el pelo natural del pintor, y que nunca le gustó el look con el que se dio a conocer en su programa.
Una vez Bob salió de la fuerza aérea, se sometió a un tratamiento que le ahorraría cortes de cabello, pues no contaba con dinero para gastar en la peluquería. Aunque nunca se imaginó que el tratamiento no fuera tan efectivo y le quedara el look con el que la televisión y el mundo artístico lo van a recordar por siempre.