Los intestinos aparecieron en dos bolsas de plástico, envueltos cuidadosamente, reportaron medios austríacos.
La mujer, cuyo nombre no se ha revelado, sospechaba que su esposo había sido envenenado, según explicó el periódico local Kleine Zeitung.
Ella quería realizar un examen toxicológico a los órganos de su marido, quien murió durante una operación en Marruecos, agrega el periódico.
Pero el médico apuntó que una investigación concluyente no podía realizarse sin el cuerpo completo.
La policía dijo que la pasajera no había violado ninguna ley.
Las entrañas han sido almacenadas temporalmente para practicar una futura investigación forense.