Por desgracia, esta no es la primera vez que el artista irlandés experimenta en primera persona la barbarie del terrorismo. De hecho, el pasado mes de noviembre la banda al completo se encontraba en la capital francesa haciendo la prueba de sonido del espectáculo que iba a ofrecer un día después en el Accor Hotels Arena de la ciudad, cuando a pocos metros del lugar, en la sala Bataclan, se produjo el tiroteo en el que perdieron la vida alrededor de 90 personas durante la actuación del grupo Eagles of the Death Metal
«Sin palabras, Bono me ha enviado un teléfono para que pudiera llamar a mi madre. Le llamé para darle las gracias y durante los siguientes tres o cuatro días me ha llamado para saber cómo estaba y rezar conmigo», comentaba el cantante al portal de noticias Xposé.
Varias semanas más tarde, Eagles of the Death Metal volvía a la capital francesa para retomar el concierto más «importante» de su carrera, al que estaban invitados todas las víctimas y familiares.