Así, el domingo pasado, 5 fans se la serie invadieron durante varias horas una propiedad privada en la ciudad de Newnan, condado de Coweta, en Georgia (Estados Unidos), con la intensión de encontrar una locación usada por la serie en su segunda temporada. Por supuesto, el grupo de seguidores fue denunciado por los dueños de viviendas cercanas quienes aseguraron que estas personas estaban tomando fotos con sus teléfonos en un área catalogada como peligrosa.