Además, agregó: “Si se piensa en ello, la mayoría de las víctimas de París son aficionados a la música. Esta es el primer golpe directo a la música que hemos tenido en esta llamada guerra contra el terrorismo. Y es muy molesto. Son nuestra gente… El efecto a sangre fría de esta masacre es muy preocupante y eso es lo que no puede salir de mi cabeza”.