Todos los títulos de Gears of War contarán con soporte de compatibilidad con versiones anteriores, después de ser lanzada al público en otoño, lo que significa que si un jugador posee Gears of War, Gears of War 2, Gears of War 3 o Gears of War: Judgment en Xbox 360, podrá jugarlo en Xbox One y utilizar algunas de sus funciones next-gen favoritas como Game DVR, Snap, screenshots y mucho más.
De igual manera, el usuario podrá conservar todos los archivos, complementos de juegos y logros guardados previamente, así como jugar con amigos en Xbox Live sin importar qué consola de Xbox esté usando. Sin embargo, no se desplegarán gráficos renovados como lo hará Gears of War: Ultimate Edition.
Xbox anunció la desafiante función de retro-compatibilidad para Xbox One en E3 2015 y ya está disponible para quienes pertenecen al programa de pruebas de la consola. Por su parte, Gears of War: Ultimate Edition debutará el 25 de agosto en Xbox One.