La joven quería encontrar un empleo y fue entrevistada para un puesto en una pizzería de Mansfield, la ciudad donde vive; sin embargo, poco después la llamaron por teléfono para decirle que había sido contratada. Algo que muchos hubiesen celebrado.
Ante la noticia, la chica decidió publicar en su cuenta en twitter: "Ewwww… mañana empiezo en ese trabajo de mierd*". Lo que ella nunca pensó es que ese mensaje le costaría el puesto.
La mala suerte estuvo de su lado y el comentario fue leído por el futuro jefe a quien no le causaron gracia las palabras de quien debía comenzar a trabajar para él en pocas horas.
Por supuesto, el nuevo jefe no sólo decidió despedirla, sino que también le contestó sus palabras a través de Twitter.
"No… no vas a empezar en ese trabajo de mierd*. Acabo de despedirte. Buena suerte con una vida sin dinero y sin empleo", respondió Robert Waple, jefe de la pizzería, en su cuenta de la red social.
Al enterarse de su despido, Cella siguió mostrando que es una mujer de actitud fuerte y contestó: "Ésta soy yo".