Una vez tuvo el objeto listo, salió a las calles a mostrarlo y dejó asombrados a varios valientes que se sintieron capaces de levantar el poderoso Mjolnir.
Todo parece indicar que este martillo está compuesto por un electroimán de microondas, que se pega a una superficie de metal y sólo se desactiva con un escáner de huellas dactilares instalado en el mango del martillo.