Esta nueva producción se grabó el 18 de diciembre de Columbia Records, en Nashville, Tennessee, cerca de la ciudad de origen del grupo de Bowling Green, Kentucky. «Con este disco, hemos querido ser más transparentes«, aseguró el cantante Matt Shultz en un comunicado. «Queríamos capturar el sentimiento de cada canción, y cualquiera que sea la respuesta emocional que provoque, para ser realmente honesto para eso«.