Tan deseado es ese trofeo, que en ningún momento Özil, Reus, Neuer y compañía dejaron de presumirlo en la Puerta de Brandenburgo. Fue tan exagerado el festejo que según declaraciones de Wolfgang Niersbach, presidente de la Federación Alemana de Futbol, la copa sufrió una astilladura que será reparada a la brevedad.
“En algún punto, una pequeña pieza de nuestro trofeo de la Copa del Mundo se desprendió, declaró Wolfgang Niersbach al portal alemán Die Welt. ¡Pero no se preocupen! Tenemos especialistas que pueden arreglarlo”, confirmaron.
“Hemos estado investigando con insistencia quién fue el que dañó el trofeo, pero las investigaciones no han arrojado resultados”.
La FIFA ya ha sido puesta al tanto sobre la situación, por lo que tomará cartas en el asunto.
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