Según el sitio ‘Daily News’, la mujer que lo denunció había sido asaltada en un tren de Bremerton, en la ciudad estadounidense de Port Orchard, Washington.
Un día después del robo, un desconocido le envió una solicitud en Facebook. La joven lo reconoció de inmediato como su agresor por su tatuaje, por lo que dio aviso a la policía. Los investigadores suponen que el sujeto espió las cuentas en las redes sociales de la mujer y que la agregó porque se sintió atraído por ella.