La conversación entre estos dos personajes duró cerca de una hora. White dio algunas declaraciones sobre su perspectiva espiritual, la moda que le gusta usar y el estilo de sus discos, y también sobre su mensaje y metas musicales.
Frente al tema de su búsqueda musical, el músico afirmó: “hacia lo que apunto [con su música] es hacia la verdad. Porque para mí el blues es la verdad. Aunque esto no quiera decir que a mí me hayan ocurrido esas cosas [que se cuentan en el blues] y que yo las vaya a narrar. Es como perseguir la felicidad. […] No considero que cuando hago música haga historias de mí mismo. Sólo presento algo que pueda ser considerado veraz y tenga sentido […] Tienes que poner la medicina dentro del puré de papas para que el que te escucha siga pensando que él descubrió algo en la canción”.
“Quería ser sacerdote […] pero me di cuenta de que si no podía dedicarle 1000% a dios, mejor me dedicaría a otra cosa”, confesó. También dijo: “A veces pienso que soy una especie de sacerdote en el escenario […] Trato de dar un mensaje y que todos [la audiencia] se conecten los unos con los otros”, agregó.
Frente al tema de la moda, afirmó: “Todos ellos se vestían para impresionar. En cuanto al diseño y la estética que utiliza cuando algo tiene que ver con discos, White cree que “la forma sigue a la función”. “Si uno opta por hacer un vinilo de color o con una fotografía distinta, logrará el objetivo […] para mí es como, cualquier cosa que te represente, hombre. Ese es el tipo de vinilo que yo compraría cuando tenía 14 años”, declaró.
En un momento de la entrevista, Dan Rather, le hace una pregunta bastante inquietante a White sobre el mensaje de su música: “¿Qué nos dice tu música sobre Estados Unidos hoy en día?” A lo que el músico respondió: “Puede que algunas personas escuchen mi música y piensen que sólo soy una persona que quiere recuperar lo retro -hacer que las cosas sean como solían ser- y puedo entenderlos. Pero realmente veo el ahora y el futuro como algo bello. Quiero que las cosas se vean bellas como cuando yo veo las cosas atrás en el pasado. Algo que me molesta mucho de estos tiempos es ese sentimiento de “sentirse merecedores”. Y en parte quisiera trascender eso. "No veo mucha belleza en un grupo de adolescentes enviándose textos entre ellos en vez de platicarse cara a cara", concluyó.
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