Según cuenta Chiao, mientras trabajaba fuera de la EEI junto al astronauta Salizhan Sharípov, vio ‘unas extrañas luces que parecían estar alineadas’ y que ‘pasaron volando a gran velocidad’.
‘Si hay vida ahí fuera, son mucho más avanzados que nosotros y saben bien cómo viajar grandes distancias en cortos periodos de tiempo’, contó el astronauta.
Además, mencionó que su compañero Sharípov no pudo ver el extraño objeto debido a que en ese momento su colega ruso ‘estaba mirando en la dirección contraria’.