Los cocineros, utilizaron 220 metros de tripa natural de vacuno y para el relleno 130 kilos de cebolla, 50 kilos de arroz, 40 kg de manteca de cerdo, 40 litros de sangre de cerdo, 7 kilos de especias y 3 de sal.
La morcilla tuvo que cocerse en una olla especialmente construida para la ocasión y después de que un notario tomara acta de su elaboración se cortó en porciones que se vendieron entre el público que asistió al acto.