"Él se mantiene bastante firme en que nunca más actuará en directo", ha declarado Visconti al semanal NME. "Uno de los dichos le decía. ‘¿Pero cómo vas a hacer esto en vivo?’ Y David le decía, ‘No lo vamos a hacer’. Era algo que dejaba caer constantemente", continúa el productor.
Bowie y Visconti coincidieron por primera vez juntos en 1969 en Space Oddity. Han trabajado juntos en la mayoría de los álbumes de Bowie más recordados, incluidos Low, Heroes, Lodger y Scary Monsters. Después de tiempo separados, volvieron a unir fuerzas a principios de los años 2000 en Heathen y Reality.
Su trabajo en este nuevo álbum ha sido muy poco a poco: "Nunca pasamos más de dos o tres semanas seguidas grabando", ha dicho Visconti. "Y después nos tomábamos unos dos meses de descanso. Normalmente trabajábamos en una o dos canciones cada tarde. Y las pulíamos hasta que se convertían en grandes temas de rock. En ese momento, no había ni voces ni letras finales. Esa ha sido siempre la forma de trabajar desde que The man who sold the world. No ha cambiado nada en eso"